IMAGINA (EL VALOR DEL ARTE Y SU INUTILIDAD)

Imagina un mundo perfecto, o un hombre perfecto, imagina algo que pueda llegar a suceder, ahora una cosa absolutamente surrealista, o un ente sin forma ni carácter concreto que simplemente haga que te sientas bien, o que te sientas mal… Imagina.

La imaginación es algo universal, no hay persona que no haya imaginado. Su utilización como verbo puede ser equiparable a la de respirar, ser o estar. Su utilización, que no su utilidad, porque lo más importante es que es extraordinariamente necesario aun también inútil.

La capacidad de imaginar algo y transmitirlo es puro arte, pero como ya sabemos, y si no lo sabemos pronto lo concluiremos, el arte es inútil. Un cuadro, un libro, una canción, una película. Ninguna de estas cosas soluciona las principales cuestiones de la vida diaria, sociedad, política y economía, lo cual nos conduce a la inutilidad en su más puro estado, porque inevitablemente son los hilos que mueven el mundo y si algo no entra coopera o tiene una utilidad dentro de éstos podemos decir que es prácticamente inútil.

Sin embargo las necesitamos. Necesitamos ese cuadro por su textura, porque nos llena de alegría, o simplemente porque decora nuestra habitación.

Necesitamos también ese libro, porque nos transporta hacia un mundo nuevo que nunca antes habíamos imaginado, porque aunque sepamos como va a acabar nos gustan los finales felices, porque en nuestras vidas hemos encontrado mejores palabras para reflejar el terror.

Necesitamos una canción porque cuando la escuchamos recordamos aquella buena época, porque nos hace reflexionar, porque nos hace olvidar los problemas, por la voz, por la letra, por los instrumentos, por el ritmo.

Y nos gusta esa película porque es innovadora, por los diálogos, por la historia, por el inesperado final, porque nos hace llorar de pena, o de alegría, o de las dos a su vez, porque sí.

¿Qué por qué lo necesitamos? ¿Os gusta la pintura?, ¿y los libros?, ¿acaso no os gusta la música?, ¿y el cine?... El arte es inútil pero ante todo es placer y todo el mundo necesita el placer, ya tenga una utilidad o finalidad o no la tenga, eso es lo de menos.

Nos pasamos la vida disfrutando del arte sin apreciar que lo es y el arte no precisa de definición ni entendimiento, precisa de valoración y fomentación así que ahora es el momento. Planteémonos esto y sobre todo sigamos disfrutando de él como cada día.

Sara Ramos Valencia